-Todas las mujeres quereis lo mismo, no quereis un tio, quereis un puto superheroe.

+Para nada.

-¿Que no? Aver, ¿tu qué tipo de tio quieres? 

+ Pues yo quiero un tio que me haga tocar las estrellas, que me lleve a Paris un sábado cualquiera, solo para tomar café mirando la Torre Eiffel. Quiero que haga de sus dedos recorriendo mi piel una adicción para mí. Quiero un tio que nunca permita que abandone los sueños que me quedan por cumplir y que me ayude a reintentar los que había dejado por imposibles. Quiero que me prometa bajarme la luna si se lo pido, que me desgaste los labios y me rompa las medias. Quiero que viva la vida sin prisas, como yo. Quiero que su unico vicio sea estar a mi lado y que haga que mi canción preferida sea su risa. Quiero que me lleve todos los fines de semana a ver las estrellas al monte más alto y que jamás me haga daño. No quiero que me regalé garantías ni planes de futuro, pero sí que me prometa un 'aquí y ahora'.

-Pues eso, quieres un puto superhéroe.

+ Sé, tal vez tengas razón, tal vez todas queramos un superhéroe, pero en realidad todas sabemos que no existe, y por eso siempre acabamos conformándonos con el primer gilipoyas que nos promete mil 'te quiero' y algún que otro 'buenos días princesas'.